No pude evitar esta posibilidad que me da de enviarle un guión, ya que usted está tratando en sus informes un tema que me ha preocupado sobremanera a lo largo de estos años.
Hace algún tiempo, un tío abuelo que le gustaba leer mucho me regaló para mi cumpleaños un libro sobre la cultura griega escrito por Friedrich Nietzsche. Como el libro era bastante gordito y se me había roto la pata del lavamanos en el baño, lo puse de soporte para que no se cayera la bacha. Pero un día de tanto mojarse comenzó a desarmarse y se le salió una hoja que hablaba de la vida de Empédocles de Agrigento, un tipo que fue famoso y que venía de una familia ilustre. Pero al parecer se enfermó o tuvo cirrosis hepática, por lo que chupaba mientras escribía un montón de boludeces que después con el tiempo parece que empezaron a darle bola otros cirrósicos como él.
Bueno la cosa es que esa bibliografía me llevó a filmar mi primer cortometraje sobre la Tragedia griega. Como siempre me pasó, nunca tuve un actor que representara las obras como son y debí modificar un poco la historia. En lugar de filmar en las ruinas de Atenas, filmé en una de las obras que derrumbaron en Caballito las empresas que hacen departamentos. El otro dato que debí modificar es el del actor. Ninguno de los que podía contratar, por el módico valor pago de dos videos míos y un pase gratis en el subte, aceptó. Y es por eso que utilicé su recurso de hablar con los vecinos, y conseguí a Tito Titarelli alias "Bob Sponja". Como Tito tenía menos idea que yo sobre la vida de este Empédocles pensamos los dos en usar el nombre para hablar de los que se ponen en pedo y salen a la calle a hacer boludeces, algo que Tito lo hacía fantástico porque así es su vida.
Le puse una sábana blanca, lo llevé a las ruinas de una obra en Caballito y le pedí que con un libro debajo del brazo comenzara a hablar en difícil. Cuando estaba filmando la segunda hora apareció la cana y se lo llevó.
Ahora tito está internado en el Borda y lo voy a visitar.
Lo dejaron internado porque le dijo a la cana que se llamaba Empédocles.
By El Coleccionista de Pilas Recargables
